Colaborando en esta campaña preventa recibirás el libro en casa antes de que entre en circulación, para que esto sea posible nos hemos propuesto alcanzar en torno a 50 reservas, para iniciar los procesos de edición justo después de finalizar la campaña; en un plazo de unos meses.
La nave Moshé se aproxima a Parvati tras su viaje de 1200 años luz. Tres cyborgs velan por la salud de los pasajeros y realizan el mantenimiento tanto de la maltrecha nave y como de las cunas en las que yacen los tres mil seiscientos durmientes que habrán de poblar la colonia.
La disidencia se opone a que los teócratas extiendan su dominio sobre la comunidad en el planeta. Sus esperanzas se ven frustradas con el apresamiento de Lohraan, su líder. Cuando todo está perdido, Lohraan desaparece. ¿Cómo ha escapado? ¿Dónde se oculta en el limitado espacio de la Moshé?
La batida de la nave tarde o temprano localizará a su líder, así que la disidencia está obligada a actuar. La confrontación está asegurada. Los cyborgs habrán de tomar partido y el conflicto se extenderá al espacio exterior a la Moshé.
Álvaro Velasco (Bilbao, 1969) es ingeniero, director de empresa, pintor y escritor. Durante años ha asistido a talleres de escritura creativa impartidos por Jon Bilbao, Txani Rodríguez, Mónica Crespo y Álvaro Colomer. Es autor de dos novelas y una veintena de relatos de ficción. Su narrativa analiza el concepto de ser humano mediante procedimientos como crear personajes que difieren en algún aspecto con el homo sapiens o colocarlos en entornos alejados de la realidad.
Adiós, Tierra. Hasta nunca es su primera novela.
«¿Cómo ha podido esfumarse el líder disidente? ¿Dónde se oculta? ¿Quién apoya a la disidencia en la sombra? ¿Quién es el saboteador? ¿Qué papel juegan los durmientes? ¿Será capaz la maltrecha nave de llevarlos sanos y salvos hasta el planeta? ¿Qué condiciones de habitabilidad tendrá aquel?
Adiós, Tierra. Hasta nunca es una Space opera que narra el final de la milenaria singladura de la Moshé hasta el sistema Parvati. La nave multigeneracional está tan deteriorada como la distópica comunidad que la habita. Teócratas, disidencia, cyborgs y durmientes pugnan por el control en un precario equilibrio de poder.
Cuando la situación se torna crítica, una persona es capaz de liderar a la comunidad hacia su destino, de mostrar la valentía de actuar contra la injusticia y de tomar decisiones duras encaminadas a evitar la catástrofe».
«Le habían llamado BUG –bicho– por su similitud con los insectos. BUG2753 se asemejaba a una cucaracha de un metro de longitud. Su caparazón metálico protegía la electrónica de la radiación como una jaula de Faraday. Las seis patas prensiles le permitían sujetarse y manipular el tegumento. No fabricaba el fino tejido de la vela, sino que desenredaba el fardo de sus entrañas como si de una araña se tratase.
Miles de bicho–robots ejecutaban una compleja danza para ensamblar la vela. Su coreografía había sido desarrollada imitando a las colonias de hormigas. Según el paraboloide de la vela se desplegaba, la nave extraía mayor impulso de las ondas gravitatorias. BUG2753 y sus hermanos no habían descansado en siete años. Habían comenzado a tejer la vela en órbita de Tierra y se habían consagrado a su silencioso quehacer ajenos a Sol y a las demás estrellas, ya que no se les había dotado de una inteligencia superior a la de un frigorífico. Una vez que la vela hubo alcanzado su máxima extensión, concluyó la misión que había dado sentido a su existencia. Entonces, todos ellos, al unísono, como siguiendo la señal de un director de orquesta, se detuvieron.
Por los siglos de los siglos».
Por otro lado, independientemente de que colaboréis realizando vuestra reserva o no, en ocasiones no se puede, sería una inestimable ayuda que os hicieseis eco de esta campaña a través del boca-oreja o por redes sociales... la Cultura, Distrito 93 y Álvaro Velasco os lo agradeceremos.