Colaborando en esta campaña preventa recibirás el libro en casa antes de que entre en circulación, para que esto sea posible nos hemos propuesto alcanzar en torno a 40 reservas, para iniciar los procesos de edición justo después de finalizar la campaña; en un plazo de unos meses.
Ariana despierta en una playa, un eco del mito de Ariadna, pero con un giro oscuro: años de sueño la han mantenido prisionera. Atrapada en el laberinto de sus recuerdos reprimidos, descubre que es la personificación de su "yo" interior, una guía en una búsqueda desesperada por sanar heridas del pasado. Su misión: desenmascarar a Teseo, el artífice de su letargo, y liberarse de las sombras que la aprisionan. En este viaje de venganza y redescubrimiento, Ariana se enfrentará a fantasmas del pasado, reencontrará amores perdidos y desenterrará fragmentos olvidados de su ser, eso sí, ayudada por algunos personajes extraídos de sus propios sueños. ¿Logrará Ariana reescribir su destino y escapar del laberinto de recuerdos, o quedará atrapada para siempre en el eco de un mito?
Escribir es todo lo que he querido hacer desde siempre: construir historias que emocionen, que reconforten, que ayuden. Pero más allá de ese sueño, puedo contar que estudié Psicología, estudios que combiné en parte con Filosofía, dos fuentes que han nutrido mis historias, además de la influencia de mis escritores favoritos: Cortázar, Kundera, Dovtoievski, Borges, Proust.
Empecé a escribir a los 18 en Blogspot, y esos retales que fue escribiendo en momentos de desahogo acabaron siendo una novela. Así empezó todo: como un ejercicio necesario para plasmar mis experiencias, transformarlas y entregarlas a mis personajes. Darles a ellos las armas para resolver sus conflictos ha sido la herramienta más poderosa que podría crear para salvarme a mí misma. Ahora, esas historias no son solo mías: también son tuyas, querido lector.
«Empecé a escribir Las reparadoras pesadillas de Ariana durante el confinamiento, el abril de 2020. Conseguí terminarlo en 26 días, y ese momento de aislamiento y reflexión fue el lienzo perfecto para pensar qué experiencias me habían llevado a ser la persona que era en ese momento. Qué conversaciones habían quedado pendientes, qué sueños había tenido que soltar por el camino y, en definitiva, pensaba en ese lugar donde se guardan los recuerdos, de forma consciente e inconsciente. De ahí el tono onírico de esta obra.
Trata sobre volver a esos momentos que han determinado nuestro futuro, para intentar resolverlos o, al menos, reconciliarnos con ellos.
Bajo este tema central, los lectores encontrarán una novela ligera, divertida, con guiños a la cultura pop y con ese toque de fantasía que puebla el mundo de los sueños y de la imaginación.»
«Selina tenía su propia vida al margen del tiempo que elegía pasar con ella, y eso le parecía un buen ejemplo de cómo deberían ser las relaciones humanas.
—Yo también me alegro de verte. —Le respondió Selina sin mover la cara.
Era como si le hubiera hablado telepáticamente, pero era mucho mejor que ver a la gata moviendo la boca y hablando como una persona, porque eso habría sido realmente siniestro. - Debes saber que yo no soy Selina al igual que tú no eres la Ariana real, pero supongo que a efectos prácticos tú y yo somos igual de reales.
—Claro, lo entiendo. Aún así, espero que estés bien, que la Selina real esté bien. Oye, no me imaginaba que dentro de mi cabeza acabaras como San Pedro en el cielo, la verdad.
—Oh, has tenido suerte. Hace media hora le cambié el turno al niño que solía pellizcarte los brazos en preescolar. —respondió la gata con los ojos fijos en Ariana. Ante la cara de sorpresa de ésta, añadió. —Es broma. A ver, es la primera vez que profundizas aquí desde el año 2010, ¿correcto?
—Eso creo, sí. Cuando hice yoga en la facultad con el Lagarto galáctico, el chico que me llevó a bailar un día y luego descubrí que era asperger y creía en los reptilianos.
—Exacto. Así que han pasado 10 años y tienes mucho que ver. ¿Visita turística o laboral? —preguntó Selina, sacando unas gafas de media luna y un sello.
—Ambas, supongo. —respondió Ariana, pensativa. —¿Cuál es el precio?
—¿El precio? Bastante tienes con que este manicomio sea tu mente. —Selló un ticket en el que ponía “La jefa está de visita” y se lo dio. Ariana se quedó muy parada mirándolo, por lo que Selina añadió. —¿Qué te esperabas, que esto fuese como cuando Thanos va a buscar la piedra del alma? Sería una estupidez, tendrías que sacrificarte a ti misma y esta mujer que vive en el mundo real se quedaría catatónica, así que pasa por la puerta giratoria con tu ticket por si alguien no te reconoce y disfruta del desfile de imbéciles que tienes ahí dentro.»
Por otro lado, independientemente de que colaboréis realizando vuestra reserva o no, en ocasiones no se puede, sería una inestimable ayuda que os hicieseis eco de esta campaña a través del boca-oreja o por redes sociales... la Cultura, Malas Artes y Rocío Villaescusa Villena os lo agradeceremos.