¿Qué?

Tras su ruptura con Pablo y la marcha de él al extranjero, lo último que Sofía esperaba era saberse quedado embarazada durante el último encuentro que tuvieron. Sin embargo, Luna llega a su vida y ella decide amarla por los dos, dándole lo que piensa es una oportunidad a su padre de ser feliz y olvidarla para siempre. Pese a todo, Sofía no es capaz de negarles la existencia de su pequeña a los padres de Pablo que, sin saber que entre ellos corren los mismos genes, acogen sin dudar en sus vidas a esa niña cuyos ojos tanto se parecen a los de su hijo…

Sin embargo, el regreso inesperado de Pablo y su encuentro con la que fue la mujer de su vida y una hija que no sabe que es suya, hará que una pequeña mentira se convierta en algo imposible de ocultar, y que sus vidas y sus caminos confluyan de nuevo bajo el influjo de la luna…

¿Quiénes?

Tandaia es una editorial con voluntad de cambio, de publicar obras poco convencionales pero de indudable calidad, con nuevas y refrescantes ideas como es el emplear una campaña preventa para promocionar cada título cuando esta todavía se encuentra en proceso de edición.

De este modo eres tú, ahora que te estás planteando cómo colaborar, el que decide si la obra que te presentamos verá la luz pasando a formar parte de nuestro catálogo... porque consideramos al lector parte fundamental del proceso.

Hoy te presentamos a Noelia Parodi.

Noelia Parodi Piñero nació en Las Palmas de Gran Canarias en octubre de 1987, aunque se siente más andaluza que canaria, puesto que lleva viviendo en tierras del sur peninsular más de veinticinco años. Maestra de profesión, desde que era pequeñita le gustaba escribir historias, poesías o pequeños relatos y no perdió esa ilusión con los años, sino que la fue renovando y adaptando a sus intereses. Ha participado en numerosos concursos y recibido algunos premios a nivel nacional. Enamorada de la lectura tanto como la escritura es, además, amante nata de los escenarios: adora hacer teatro y cantar, sobre todo si interpreta sus propias canciones. Su sueño: compartir con el resto del mundo la vida encerrada en sus historias.

«Cuando aparezca la Luna surgió de un sueño, de un momento concreto que, poco a poco, cuando me senté frente al ordenador, se fue convirtiendo en la historia que ahora da forma a este libro. Intenta ser una novela fresca que te atrapará a través de las distintas situaciones por las que pasan sus personajes y que irán tejiendo las redes de la historia principal. Si buscas un libro fácil de leer, original y que te haga sentir emociones de todo tipo, sin duda, esta ha de ser tu elección».

¿Por qué?

Y por aquí una muestra de lo que encontraréis en sus páginas:

«Su hija… Sofía comenzó a ponerse nerviosa, más aún de lo que le había puesto clavar de nuevo su mirada en aquellos ojos negros que tanto la habían amado y a los que tanto había amado ella. Su presencia allí no era algo que ella esperara, y menos aún en la puerta del colegio, con su niña (de los dos) a punto de salir del colegio. ¿Descubriría él la verdad callada en la mirada de su hija? Se dio cuenta de que era absurdo, por mucho que ella viera las similitudes, la niña no era idéntica a ninguno de los dos. Podía ser hija de cualquiera. Pero la realidad es que era la hija de él, y aquella verdad hasta ahora escondida por el bien de todos (eso pensaba ella), se convirtió en una mentira demasiado grande.
          Pablo notó el nerviosismo en Sofía. Miraba continuamente a la puerta del colegio, de donde parecía esperar a alguien. Entonces lo entendió todo. Esperaba a alguien. Seguramente algún compañero de profesión con el que compartía algo más que el oficio. Sin saber por qué, se sintió dolido. Qué idiotez, se dijo a sí mismo. Sofía y él apenas eran ya dos personas que se habían conocido alguna vez. Sin embargo, su corazón se encogió ante la perspectiva de ver salir por aquella puerta a un hombre que la besara, la abrazara y se la llevara lejos de él, más lejos de lo que él ya sabía que estaban.
          Las puertas del colegio se abrieron sacando a ambos de sus pensamientos. Pablo quiso marcharse antes de ver la realidad, pero ya era tarde. No podía decir adiós e irse sin más, no mientras ella seguía mirándolo con ansiedad, una ansiedad que no lograba comprender. ¿Se sentía incómoda por su presencia? ¿Sabía aún que verla con otro le hacía daño?
          A lo lejos, una de las monitoras que se asomaba a la puerta llamó a varios niños: “¡Lorena, Ismael, Luna, vuestros padres!”».

Además...

Sabemos que son tiempos difíciles, también nosotros los sufrimos, y es posible que no te encuentres en disposición de apoyarnos con tu mecenazgo en estos momentos... pero esperamos que si esto te ha llegado al alma, incluso si tal vez conoces en persona al autor, trates de difundir esta campaña (facebook, twitter, blogger, boca-oreja... ) para que alcancemos nuestra meta y Noelia Parodi vea publicada su obra.