El Crowdfunding se ha convertido en los últimos tiempos en la única forma de financiación para muchos emprendedores que quieren alcanzar su sueño e instaurar su propio negocio. Este método alternativo de captación de capital fundamentado por su carácter colectivo, ha dado salida a numerosos proyectos, ideas que han sido consumadas con un éxito rotundo.

Hoy se conoce el crowdfunding gracias al auge de proyectos como fue el nacimiento del partido político Podemos, cuya financiación surge con este concepto, sin embargo, este método ha sido usado desde épocas medievales, en las que los grandes apellidos feudales o la propia Iglesia, invertían en los diferentes negocios de éxito mediante cuentas partícipes, obteniendo beneficios de las mismas.



Sin embargo, ¿por qué este renacer del crowdfunding? ¿cuál es el motivo por el que está en boca de todos? Es fácilmente deducible, el desarrollo comunicacional que se ha producido en los últimos años: el internet de las cosas, ese término que ahora usamos para hablar de nuestra vida cotidiana, presente de manera continua y cuya cultura ha globalizado el mundo occidental: Internet.

Pues bien, este fenómeno ha contagiado también el mundo de las finanzas y han resultado ser muchas las vías que hoy tiene una empresa o una persona para emprender su camino en el mundo de los negocios. Tras unos inicios en los que la seguridad del contenido, de los proyectos, no era la deseada, actualmente contamos con las herramientas necesarias: en la creación de webs y el uso de servidores flexibles adaptables a nuestros proyectos e igual de importante la protección de datos para los usuarios, imprescindible para que la revolución de internet no ponga en riesgo nuestras empresas.

Las plataformas digitales de crowdfunding que nos encontramos actualmente, han puesto en contacto a emprendedores, ideas y proyectos con propuestas de valor muy interesantes, sin opulencias, sólo con motivación, esfuerzo y buenas ideas. Los negocios han retornado y tomado un nuevo camino,entender a sus futuros clientes, a sus fans, escuchar sus opiniones, testar y adecuar el proyecto a la realidad y a la necesidad del mercado.



Los proyectos que apuestan por el uso de estas plataformas, están asumiendo la responsabilidad de llevar a su comunidad el beneficio de su bien, de su servicio o compartir su éxito. Es muy bonita o incluso romántica la idea de: son ellos, mi comunidad, la que ha apostado por mí, mi idea y las que han hecho posible mi sueño, de la misma forma que el cantante agradece a sus fans en sus conciertos, en el crowdfunding, el emprendedor agradece a sus mecenas.

Los pilares fundamentales del crowdfunding: emprendedores y mecenas, en definitiva, una relación de apoyo, asociados, fans, interrelaciones que se complementan y en la que todos salen beneficiados, en la que la comunicación es constante y la escucha activa es base fundamental para que alcanzar el éxito.

Carmen Moreno