Vamos a pedir un perro de asistencia para mi hijo Daniel, un niño autista de 16 años, para que le pueda ayudar en su día a día, y a comunicarse con el entorno que le rodea, su familia y colegio sobre todo.
Mi hijo no tiene adquirido el lenguaje ni otra forma de comunicación por lo que es muy complicado su socialización y se complica con las estereotipias múltiples que presenta, las cuales suelen ser diferentes según avanza en edad.
Hemos trabajado muchas terapias con él desde que nació pero aunque siempre se consiguen pequeños logros, la verdad es que Daniel ni se comunica ni entiende su entorno, por lo que hay que anticipar todo con pictogramas y fotografías. Un perro de asistencia le ayuda a bajar el nivel de estres y ansiedad, relajándole y haciendo que desaparezcan sus esterotipias y podamos trabajar mejor con él.